La Disciplina Positiva es educación, entendimiento, motivación y comunicación, no castigos. Los principios de este método sirven par crear una relación de amor y respeto con los hijos y ayudan a vivir y solucionar problemas de manera conjunta.
Las técnicas de Disciplina Positiva son distintas de las de la Disciplina convencional. Éstas se basan en los trabajos de los psiquiatras vieneses Alfred Adler y Rudolf Dreikurs, quienes abogaban por la necesidad de los niños de conectar y tener buenas relaciones con las otras personas que les rodean, para poder crecer y aprender de manera correcta.
Gran parte de la actividad de los infantes en edades tempranas, está más relacionada con el desarrollo emocional, físico, cognitivo y con el comportamiento propio de la edad, que con un “mal comportamiento”. La disciplina durante la infancia tiene más relación con lo que los padres hacen, que con lo que ellos esperan del pequeño. Es decir, nuestros conocimientos de la inteligencia emocional y actitudes son fundamentales.
El castigo puede funcionar a corto plazo, pero creando a largo plazo rebeldía y resistencia. Es mucho mejor implementar los principios y recursos de Disciplina Positiva durante los años que ejercemos la tarea de educar a los hijos.
Por Inma Corebera, Facilitadora en comunicación familiar, motivadora en Disciplina en Positivo. http://disciplinaenpositivo.com/